Desde la Asociación Forestal Argentina graficaron el escenario actual de la actividad y las perspectivas del sector en toda la cadena productiva de la foresto-industria, destacando que “la base obtenida de hectáreas forestadas se logró con la Ley 25.080 de Inversiones para Bosques Cultivados, que fue prorrogada hasta el 2019. El Estado Nacional ha invertido entre el 2000 y 2011 un total de 423.055.986 pesos de subsidio forestal, cubriendo una superficie de 585 mil hectáreas entre plantaciones, poda y raleo. Esto benefició a un total de 30.241 productores y 20.819 planes forestales presentados en el marco del régimen nacional”, dijo Jorge Barros, directivo de la principal entidad gremial empresaria del país. En este sentido, consideró que la normativa “debe mantenerse” dado que atiende a pequeños, medianos y grandes productores con diversos beneficios.
En la actualidad, el 90% de la producción industrial de base forestal de Argentina proviene de bosques cultivados. “Nos encontramos con oferta disponible de materia prima, que permitiría duplicar la producción actual de la industria forestal. Además, hay unos seis millones de toneladas de residuos de madera estimados que se queman o se pierden al año. Mientras, tenemos un saldo negativo en la balanza comercial que llegó a casi 600 millones de dólares en 2010”, precisó Barros.
En el país se están impulsando políticas de largo plazo para el sector, con el Plan Estratégico Agropecuario 2020 de Plataforma Forestal que impulsan en el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca y el Plan Industrial 2020 del Ministerio de Industria. Sin embargo aún hay materias pendientes por resolver en una cadena productiva que abarca 15.200 empresas que generan alrededor de 158 mil puestos de trabajo; una actividad que presenta una vinculación estratégica con el desarrollo de las economías regionales; que utiliza un recurso renovable y ecológicamente sustentable; y que exhibe un alto grado de interrelación con otros sectores del entramado industrial.
Fuente: Misiones Online